Podemos anticipar:
·
Desarrollar una capacidad de desenvolverce en el mundo
con centros de formación que crucen fronteras
donde la competencia y la trayectoria seran los verdaderos factores en
el mercado laboral (más importantes que un titulo)
·
Una conectividad que permita espacios educativos más ricos, más
completos
por ejemplo: Clases online.
·
Practicas y tecnologías de enseñanza que estén disponibles para mejorar
aprendizaje y redicir costos
Trayectorias individuales de aprendizajes.
Evaluaciones permanentes.
·
Mentor que permita descubrirnos e inventarnos (nos eduque)
Guia que interviene no tan solo en lo academico, si no que también en un
plano emocional y afectivo
Facilita el descubrirse a si mismo.
Todo esto forma una avalancha que se aproxima, la cual tendra una
repercución en nuestra educación, sobre todo en la educación superior.
Surgirá la emergencia de un nuevo espacio de posibilidades para la
educación, esto nos lleva al espacio virtual, donde encontramos los MOOC
(Masive Open Online Courses), los cuales implican un costo más reducido de
formación academica, un ejemplo de hoy en día es el Khan Academy.
Esperamos que la mayor conectividad, el desarrollo de internet, la
computación avanzada y la aplicación de otras tecnologías al espacio educativo
tengan un fuerte impacto en la educación, en poco tiempo.
Esta potencial avalancha de cambios, iremos viendo como nos afectara
dentro de 5 años más. ¿Cómo enfrentá Chile esta avalancha de cambios?
Debemos estar en un monitoreo constante de esta ola de cambios con vista
al 2025, intentando comprender su profundidad y alcance, en especial, la
posibilidad de que las autoridades nacionales vayan perdiendo su poder
normativo y regulador con respecto a la entrega de titulos y el ejercer de las
carreras.
Poner nuestra mirada a que con costos menores lograr resurgir la figura
del mentor, y con él hablilidades que permitan dar sentido al mundo, construir
identidades y alentarnos a navegar la aventura de la vida.
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